
El reciente anuncio del Grupo Municipal Socialista sobre la aportación de la Diputación de Lugo para financiar la nueva “Brigada Ágil” supone una nueva muestra de la falta de coordinación y confianza entre los socios de gobierno en el Ayuntamiento de Lugo, el PSOE y el BNG.
Con esta medida, el grupo socialista pone en marcha un servicio paralelo al ya existente, duplicando competencias, gasto público y generando confusión en la gestión de los servicios municipales. Esta nueva brigada, promovida por el PSOE, no responde a una necesidad real, sino a un interés claramente partidista y electoralista, con la mirada puesta en las elecciones municipales de 2027.
Existen puestos vacantes en la RPT (Relación de Puestos de Trabajo) que permitirían cubrir este tipo de tareas con personal propio del Ayuntamiento. Sin embargo, en lugar de reforzar el servicio público con personal fijo, consolidando derechos laborales y garantizando la continuidad y calidad del servicio, optan por un modelo que desprecia el papel del personal municipal y que pone de manifiesto una falta absoluta de planificación. La creación de esta brigada, sin coordinación con el servicio ya existente, es un claro tirón de orejas encubierto del PSOE al BNG, o bien un nuevo episodio de una estrategia electoral disfrazada de gestión. En cualquier caso, los únicos perjudicados son los vecinos y vecinas de Lugo.
La creación de esta brigada supone:
Duplicidad de funciones y gasto público innecesario.
Falta de coordinación entre los socios de gobierno.
Pérdida de credibilidad en los servicios municipales.
Vulneración de los derechos de los trabajadores públicos, al sustituir plazas estructurales por contratos temporales sin garantías.
Gestión improvisada y orientada al rédito político, no al bien común.
Además, esta situación genera incertidumbre en los protocolos de actuación: ante una avería o deterioro en el espacio público, ¿quién interviene? ¿La brigada del BNG o la del PSOE? Esta falta de claridad revela un modelo de gestión clientelar, poco transparente y profundamente ineficaz.
Desde el PP defendemos que los fondos públicos se utilicen con responsabilidad y eficacia, no para alimentar rivalidades internas ni campañas disfrazadas de proyectos municipales. Lugo no necesita dos brigadas para arreglar el mismo banco roto. Lo que necesita es un único gobierno que crea en los servicios públicos, en su personal, y que actúe con transparencia y rigor.
Por eso pedimos al gobierno municipal que deje de jugar al solitario y de competir entre ellos mismos, y que empiece a trabajar con seriedad por los problemas reales de la ciudadanía de Lugo.